
En septiembre, los argentinos enfrentarán varios ajustes económicos que impactarán en sus bolsillos. Los aumentos afectarán áreas clave como:
Tarifas de servicios públicos: Las facturas de luz, gas y agua se incrementarán. La energía eléctrica subirá un 0.5% en su precio mayorista, y AySA ajustará su tarifa hasta un 1% por el coeficiente K. Los precios del gas también se modificarán.
Alquileres: Los contratos regidos por la ley anterior verán un aumento del 50.3%. Aunque es una cifra menor a las de meses previos, sigue representando una carga significativa para los inquilinos.
Combustibles: A partir del 1 de septiembre, los impuestos a la nafta y al gasoil subirán, lo que impactará directamente en el precio final en las estaciones de servicio. Esta es la primera de dos fases de un cronograma de aumentos impositivos que se extenderá hasta octubre.